Acreditamos que el aceite usado no se incorpora bajo ninguna circunstancia al consumo humano o animal.
Cumplimos con todos los requisitos de la normativa internacional estando auditados por el esquema de certificación más exigente en materia de trazabilidad y sustentabilidad.
Somos una empresa Registrada y Habilitada para el desarrollo de la actividad.
Nuestro software permite trazar perfectamente el completo proceso del residuo.
Somos una empresa especializada en prestar un servicio de recolección de aceite a nivel mundial por lo que nuestros procesos están destinados a mantener un servicio de gran calidad para nuestros clientes.
Ofrecemos un servicio de manera regular durante los 365 días del año y aseguramos la recolección a largo plazo.
Certificamos a través de nuestras pruebas realizadas con testers homologados la calidad el aceite y su correcto uso. Esto permite adaptar sus procesos para cumplir con la legislación sanitaria y evitar sanciones de la inspección.
A través del acceso a nuestra aplicación el cliente puede acceder a sus remitos y datos de recolección (fecha, lugar de recolección etc) y podrá analizar las distintas estadísticas y gestionar sus informes.
A través de nuestras Adhesivos acreditativos, la información en nuestra web y redes sociales publicitamos a aquellas empresas comprometidas con el medio ambiente y salubridad a las que prestamos el servicio de recolección.
A través de nuestro teléfono de atención al cliente y de nuestros recolectores así como de charlas y cursos asesoramos a nuestros clientes en el uso del aceite, su manipulación y deshecho.
El cliente puede solicitara que se recoja el aceite usado a través de nuestra APP en cualquier momento.
Contamos con una estación que nos permite monitorizar, tratar, y conservar el aceite cumpliendo todos los parámetros internacionales.
Opcionalmente nuestros clientes cuentan con un sistema de sensores en sus bidones que permiten ofrecer un sistema de recolección eficiente ya que nos anticipamos al llenado de los bidones y también permite a los establecimientos monitorear el cumplimiento de los protocolos de cambio de aceite de las freidoras, evitando así sanciones por inspecciones sanitarias y, lo que es más importante, proteger la salud de sus clientes.